SELECCIÓN MASCULINA
23 debuts para fortalecer una excepcional base
7/14/2016 - 9:14 AM
Con la primera internacionalidad de Ilimane Diop en Burgos ante Angola, ya son 23 los jugadores que han debutado con la selección absoluta en la última década demostrando que la ‘fábrica española’ logra que el talento se asiente en la élite.
ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
En septiembre de 2006, España se proclamaba campeona del mundo en Saitama con doce jugadores para el recuerdo: José Manuel Calderón, Carlos Cabezas, Sergio Rodríguez, Juan Carlos Navarro, Rudy Fernández, Álex Mumbrú, Berni Rodríguez, Carlos Jiménez, Jorge Garbajosa, Pau Gasol, Felipe Reyes y Marc Gasol.
Un excepcional grupo, conformado en su núcleo por jugadores de la excepcional generación del 80, pero que venía ya reforzado por jóvenes deslumbrantes nacidos unos años más tarde, como Rudy Fernández y Marc Gasol (1985) y Sergio Rodríguez (1986).
Esos doce jugadores repetirían un año después en el Eurobasket de España. Pero desde ese mágico verano en Japón, hasta 23 jugadores han debutado con una selección absoluta que, a la vez que ha mantenido su genial base gracias al enorme compromiso de sus componentes, ha ido incorporando a las que en su momento eran las jóvenes promesas del baloncesto nacional y que ahora ya se han convertido en estrellas a nivel nacional e internacional.
Ilimane Diop, uno de los jugadores más destacados de la generación del 95 (plata el pasado verano en el Europeo U20M), ha sido el último jugador en vestir la camiseta del combinado nacional. De esta lista de debutantes nos encontramos los nombres de Ricky Rubio (1990) y Víctor Claver (1988), que jugaron su primer encuentro con España en julio de 2008. El base de El Masnou, incluso, formó parte del ‘roster’ final que se llevó la plata en los Juegos de Pekín.
Un año más tarde, en el verano de 2009, se producía el debut de otro jugador que se ha convertido en un fijo en las convocatorias. Sergio Llull (1987) disputaba su primer encuentro en Las Palmas para acabar jugando el Europeo de Polonia y llevándose el oro.
En 2010, disputaba su primer encuentro Fernando San Emeterio (1984), que desde entonces solo faltó en la Copa del Mundo (2014). Y un año después, era Serge Ibaka (1989) quién tenía un impacto inmediato en el Eurobasket 2011.
En las cuatro últimas convocatorias se ha producido el progresivo desembarco de jugadores nacidos en la década de los noventa, que constituyen el futuro más inmediato del baloncesto español. Pablo Aguilar (la excepción al nacer en 1989), Nikola Mirotic (1991), Álex Abrines, Dani Díez y Guillem Vives (todos ellos de 1993) y Willy Hernángomez (1994) no solo han tenido la oportunidad de debutar con la absoluta después de un brillante paso por las categorías inferiores, sino que también, en el caso de algunos de ellos, han comenzado a engordar un palmarés que amenaza con ir creciendo verano tras verano.