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Fue en el primer partido de España en la fase final del campeonato, una liguilla entre los 6 mejores de la primera fase y la anfitriona Colombia, y con 15.000 aficionados en las gradas del espectacular pabellón de la ciudad de Cali. La superioridad española fue aplastante desde el salto inicial, ya en el descanso el marcador era de 75-34.

Los anotadores de aquel partido fueron López Iturriaga (24), Epi (19), Romay (19), Brabender (16), Margall (14), Martín (12), Solozábal (12), Sibilio (8), Corbalán (8) y Costa (5).
España firmó elevados registros de anotación en todo el campeonato. Superó los 100 puntos en cuatro de sus nueve partidos, y en otros tres estuvo por encima de los 90. El partido por la medalla de bronce contra Yugoslavia acabó 117-119 tras un último minuto trepidante.

Con todo, la historia de la Selección registra una anotación aún superior en otro partido. Pero no corresponde a un campeonato oficial de la FIBA, sino a los Juegos Mediterráneos. En su edición de 1987, celebrada en Siria, España endosó 142 puntos a Líbano. El máximo anotador del partido fue Ferran Martínez (29) y el parcial tras el descanso, de nada menos que 80-17.

EL TOP DE ANOTACIÓN