Una lesión le apartó del Eurobasket 2013. Pero Cruz, autora de algunas de las canastas más icónicas en la historia de la Selección, pudo desquitarse en Praga cuatro años después. También ante Francia, cuajó un encuentro impecable para conseguir su primer Oro y devolver a la Femenina a lo más alto del podio continental.
MANUEL DE LA TORRE / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
El 25 de junio de 2017 recuperó la hegemonía en el baloncesto continental. Aquella noche, en Praga, la Selección volvió a subirse a lo más alto del podio en un Eurobasket Femenino. El
tercer Oro europeo llegó, como en 1993 y 2013, con Francia como rival en la final. Un partido especial para una jugadora clave en el equipo a lo largo de esta última década. Nos referimos a
Anna Cruz. Unas molestias físicas impidieron que no pudiera estar a las órdenes de Lucas Mondelo en el Eurobasket 2013. De ahí que tuviera marcada en rojo la cita de la
República Checa de 2017.
Aquel verano, Cruz se quitó la espina y pudo conseguir su primer título con la Femenina. El primero de los Oros que luce en su currículum tras revalidad corona en Belgrado en julio de 2019. Francia, verdugo en las semifinales del Europeo 2015, no aguantó el ritmo español en el encuentro decisivo de 2017 (
71-55).
Sancho Lyttle y Alba Torrens llevaron el peso anotador. Pero la victoria no se podría haber entendido sin la labor de Anna Cruz. Un trabajo oscuro, necesario y eficaz en ambos aros. Una labor de desgaste impagable haciendo gala de su inagotable energía.
Pero, a la par de sacrificarse, Anna también fue capaz de brillar en la final. Sus dos triples (firmó una docena de puntos) fueron claves para sacudir lejos la presión y empezar a poner tierra de por medio. Valiente, atacó el aro y repartió juego (entregó 5 asistencias). Además de cargar el rebote pese a la superioridad física de las bleus. Dos de sus tres rebotes fueron en ataque. El
+18 cosechado por la Selección con ella en pista subraya su peso e importancia en un partido que supuso el tercer campeonato de Europa para la Femenina. El primero para Anna Cruz.
Sus números en… 23 minutos
12 puntos
3 rebotes
5 asistencias
1 robo
5/9 en tiros de campo (2/3 en triples)
1 falta recibida
16 de valoración
Anna Cruz con la Selección
Cuando debutó en 2009 con la Absoluta, sus compañeras destacaban su velocidad. Pero además de ser un auténtico correcaminos, Anna Cruz es mucho más que eso. Agilidad, rapidez y talento. Mucho talento. Una jugadora que se crece en el ‘clutch time’. No obstante, son varias las acciones suyas que han decidido partidos apretados. Suya es la canasta que, en el último segundo, acabó con Turquía y dio el pase a las semifinales en los Juegos de Río. 158 veces internacional, ha subido al podio en ocho de los nueve torneos internacionales que ha disputado. Garantía de éxito. Además, ella y Amaya Valdemoro son las únicas jugadoras españolas en ganar un anillo de campeonas de la WNBA.