SELECCIÓN MASCULINA
El Oro de Pekín
12/23/2019 - 10:32 PM
¡Campeones del Mundo! Trece años después del histórico oro 2006, la Selección Absoluta Masculina volvió a lucir el metal más preciado del baloncesto mundial. Un campeonato impecable, una enésima lección de valores de Equipo y varios partidos inolvidables, como las victorias sobre Italia y Serbia y la apasionante semifinal contra Australia. Del oro de Saitama al oro de Pekín.
El primer campeonato en dos décadas sin Pau Gasol ni Juan Carlos Navarro fue toda una reivindicación de oro. España no acudió a China entre las grandes favoritas pero acabó subiendo a lo más alto del podio mundial, trece años después de Saitama, con un nivel de baloncesto extraordinario y una nueva lección de los valores de equipo que la han hecho grande entre los grandes.
El primer paso del camino hacia el oro se dio en febrero, cuando España acabó líder de grupo de la fase de clasificación tras derrotar a letonia en Riga (62-67) y a Turquía en Tenerife (74-58) y cerró con un balance de 10-2 unas ‘ventanas’ para la historia.
Ya en el Mundial, España cerró invicta la primera fase con victorias sobre Túnez (101-62), Puerto Rico (73-63) e Irán (73-65), encaró los cruces con dos espectaculares triunfos sobre Italia (67-60) y Serbia (81-69), superó a Polonia en cuartos de final (90-78), derrotó a Australia en una agónica y emocionantísima semifinal tras dos prórrogas (95-88) y se proclamó campeona del Mundo superando con claridad en la final (95-75) a la Argentina de Campazzo, Scola, Laprovittola, Deck y compañía.
Ricky Rubio tuvo el premio añadido a su extraordinario Mundial siendo elegido MVP del campeonato, y junto a él formó en el mejor quinteto Marc Gasol, acompañados por el serbio Bogdanovic, el argentino Scola y el francés Fournier. Para Scariolo fue también un Mundial histórico porque significó su séptima medalla (cuarta de oro) en nueve veranos al frente de la Selección. Para Marc Gasol, encumbrado en apenas unos meses como campeón de la NBA y campeón del mundo. Y para el propio Marc y Rudy Fernández, el gran capitán, porque se convirtieron en los dos únicos campeones del mundo en dos ocasiones.
A su regreso, jugadores y técnicos vivieron un impresionante recibimiento por parte de miles de aficionados reunidos en la Plaza Colón de Madrid. “Llegas a España y ves la ilusión que has despertado, la alegría generada, sobre todo entre los más jóvenes. Te miran, te preguntan… Eso para mí, no tiene precio”, aseguró Marc Gasol.
La Selección de Oro, que un verano más dirigió Sergio Scariolo, la formaron Rudy Fernández como capitán, Ricky Rubio, Sergio Llull, Marc Gasol, Juancho Hernangómez, Willy Hernangómez, Quino Colom, Pau Ribas, Pierre Oriola, Xavi Rabaseda y Javier Beirán. De sus doce jugadores, cinco habían participado en mayor o menor medida en las ‘ventanas’ de clasificación.