Iris junio o Lang Acoydan soñaban de pequeños con ser Pau, Lyttle, Navarro o Alba Torrens. El próximo verano, en plena adolescencia, afrontarán su bautismo en la competición oficial internacional con las Selecciones U16 iniciando otro sueño: el de emular a sus ídolos. Los más lejanos o incluso los que conquistaron las Medallas de Oro Masculina y Femenina Cadete en 2013. Bendita presión, ya habitual, que no ha pesado en las nuevas generaciones del Baloncesto Español en las últimas dos décadas consideradas como la Edad de Oro de nuestro deporte a nivel internacional.

Para lograrlo el Método FEB se basa en cinco principios básicos: Competir, potenciar las Virtudes de los jugadores, alinear a Líderes y Dinamizadores en sus banquillos, enseñar a conocer el Oficio y estudiar a los Rivales con devoción. Pero, sobre todo, se funden en una máxima: Volver a empezar cada verano sin mirar demasiado atrás.

JOSÉ LUIS SÁEZ: "COMPROMISO, ESPÍRITU DE EQUIPO Y TALENTO"

El presidente de la FEB afirma que “nuestras selecciones son las embajadoras internacionales del baloncesto español, y por ello en gran medida las responsables de la excelente imagen y la admiración que provoca más allá de nuestras fronteras. Gracias a los resultados deportivos de los últimos años, España es la primera potencia del baloncesto europeo y la segunda del mundo, sólo por detrás de Estados Unidos”.

El presidente de la FEB destaca que las Selecciones tienen “compromiso, espíritu de equipo y talento, valores con los que el llamado Método FEB pretende que todos nuestros equipos tengan un sello propio basado en la competitividad: aspirar a todo con la máxima ambición y el máximo respeto por los rivales”.

ÁNGEL PALMI: "APRENDER A COMPETIR"

El director deportivo de la FEB asegura que “intentamos ver las Selecciones como son, y no como nos gustaría que fueran, y a partir de esa situación, trabajamos en colaboración con Clubes y Autonómicas. El objetivo no es conseguir la obediencia de cada jugador y jugadora sino su implicación para conseguir generar la inspiración y armonías necesarias para que cada Selección alcance su máximo rendimiento”. Palmi añade que “nuestra máxima ilusión es ayudar a que los jugadores y jugadoras aprendan a competir en el baloncesto como lo harán después en sus vidas”

AUSENCIAS, PRESENCIAS E ILUSIONES

“Como cada temporada el listón está muy alto” reconocía Alba Torrens tras el sorteo del Mundial Femenino. Y es que en esta categoría el 36 de 36 en partidos oficiales con pleno de Oros en 2013 (U16, U18, U20 y Absoluta) ha sido motivo de estudio de la Federación Internacional. Pero el próximo verano habrá dos ausencias poco habituales. Tras casi 20 años acudiendo ininterrumpidamente a su cita con el equipo nacional absoluto Amaya Valdemoro y Elisa Aguilar han colgado las botas y no podrán ayudar en la pista al Seleccionador Lucas Mondelo en Turquía.

Dos ausencias que contrastan con los retornos en categoría masculina de Pau Gasol y Juan Carlos Navarro. Uno de los grandes motivos para la ilusión de la afición y la sonrisa del seleccionador, Juan Antonio Orenga, que tendrá ante sí la responsabilidad de dirigir al actual subcampeón olímpico con el empuje de la afición española. Todo el país comienza a calentar motores cara a la gran cita de septiembre donde Pau Gasol ya ha avisado de que “tendremos que hacer un esfuerzo para canalizar la ilusión de aficionados, periodistas y jugadores. Hay que conseguir que tengamos las menores distracciones posibles y ser maduros para que la ola de entusiasmo no nos lleve por delante.”

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